Cuando se empieza el tratamiento para llegar a la cirugía bariátrica y posterior a ella, la disminución del peso corporal exigirá que el paciente se adapte y acepte su “nueva imagen corporal”, lo que sin lugar a dudas va a generar cambios en su satisfacción corporal y en la forma de sociabilizar y por tanto de relacionarse con el otro y consigo mismo.
La imagen corporal en los pacientes que padecen obesidad es un tema sensible, en donde la mirada del otro y por tanto la “aceptación/aprobación/reprobación” del otro, como de sí mismo, lo condicionan muchas veces en su propia mirada y en su propia aceptación.
En general, las personas obesas dejan de mirarse al espejo por “el desagrado” que les provoca muchas veces su imagen corporal y cuando lo hacen, la mirada es tan crítica que evitan volver a hacerlo. No nos reconocemos frente al espejo. No coincide el interior con el exterior, y resulta mucho más fácil evadir y evitar.
Pero ¿a qué nos referimos cuando hablamos de imagen corporal?
La imagen corporal es una representación mental que cada persona construye en términos de sentimientos, actitudes y conductas en relación al propio cuerpo.
La mayoría de los autores que escriben sobre obesidad y cirugía bariátrica afirman de que se trata de un constructo multidimensional que incluye diferentes componentes, como lo son:
• El componente perceptual como por ejemplo el tamaño del cuerpo, las partes del mismo.
• El componente subjetivo como los aspectos cognitivos y afectivos en relación a la valoración del propio cuerpo mostrando con ello la satisfacción o insatisfacción del mismo.
• El componente conductual por ejemplo la exhibición o la evitación en relación a mostrar o no el cuerpo.
Se entiende que tras la cirugía bariátrica los pacientes mostrarán una mejoría en cuanto a la satisfacción en relación a su imagen corporal pero también puede pasar que siga existiendo cierta insatisfacción (por ejemplo el exceso de piel o la flacidez, entre otros).
Por todo lo anterior es que resulta de suma importancia el trabajo psicológico comprometido y sostenido durante todo el proceso, tanto en el pre como en el post operatorio, con el fin de ayudar al paciente en la adaptación y aceptación de la nueva imagen corporal que le devolverá el espejo y por tanto a su nuevo estilo de vida posterior a la cirugía.
Lic. María Soledad Maza